Las obras iniciadas hace algo más de 14 meses en el singular Palacio de los Orozco de Úbeda han comenzado a dar sus frutos de una forma palpable. Tanto es así que, una vez retirados en días pasados los andamios de la fachada, ésta aporta más luz a la plaza de San Pedro, la cual está presidida por el edificio. Esto se debe a que se han limpiado y restaurado todos los elementos de la cara visible del inmueble.
El objetivo de la intervención es poner freno al proceso de deterioro en el que está sumido el palacio desde hace demasiado tiempo. La actuación, totalmente privada y sin apoyo desde lo público, corre a cargo de los titulares del inmueble (la familia Miras Orozco). Y el resultado de lo realizado hasta el momento, como obras más urgentes y de seguridad, ha sido tan satisfactorio que han mostrado su intención de continuar poco a poco, pero sin interrupciones, hasta que el edificio quede lo más digno posible.
Así, incluso han pedido presupuesto para acometer una serie de actuaciones en el interior, mejorando el patio acristalado, haciendo algunos nuevos forjados más y reconstruyendo algunas estancias y elementos decorativos. Hasta se quiere intervenir en el jardín trasero, lo cual se uniría a los trabajos para completar la parte superior de la fachada y la cara lateral.
El trabajo en la fachada principal lo ha llevado a cabo el ubetense Manuel Martos con su empresa de restauración de patrimonio. Concretamente, ha procedido al saneamiento y picado de toda la superficie, así como a la consolidación de los elementos que aún se conservaban. Y en el caso de los desaparecidos, se ha hecho una reconstrucción volumétrica. Es el caso de algunos capiteles y guirnaldas, que han podido realizarse mediante moldes sacados de los originales todavía existentes.
Se trata de elementos decorativos de yeso que, según manifestó Manuel Martos a IDEAL, no aguantan muy bien el paso del tiempo estando a la intempérie, por lo que había mucho por reconstruir. De la misma forma, y con moldes, se han hecho unos nuevos pebeteros de cerámica similares a los deteriorados que había en la parte más alta como límite de la terraza.
Martos mostró su satisfacción por el luminoso resultado que aporta un renovado aspecto a la plaza de San Pedro. E incluso anunció que se ha pedido al Ayuntamiento que se poden un poco más algunos de los árboles del entorno para que la fachada del palacio pueda ser contemplada en todo su esplendor una vez que las ramas se cubran de nuevas hojas.
Martos mostró su satisfacción por el luminoso resultado que aporta un renovado aspecto a la plaza de San Pedro. E incluso anunció que se ha pedido al Ayuntamiento que se poden un poco más algunos de los árboles del entorno para que la fachada del palacio pueda ser contemplada en todo su esplendor una vez que las ramas se cubran de nuevas hojas.
El Palacio de los Orozco fue construido en el siglo XIX y aporta a la plaza de San Pedro un aspecto refinado que poco tiene que ver con el dorado de las piedras renacentistas de Úbeda. Pero se integra perfectamente en el entorno y le da una personalidad especial. Destacan de este palacete las molduras de yeso de la fachada, que se acompañan de guirnaldas vegetales y figuras talladas, todo ello de estilo modernista y con reminiscencias francesas, de una elegancia impropia de la ciudad y de la época en que fue levantado.
autor: Alberto Román
