El proceso para que el distrito minero de Linares-La Carolina adquiera la catalogación como Zona Patrimonial y, de ahí, poder su reconocimiento como parque cultural avanza, con paso firme, gracias a la intercooperación de los diferentes agentes implicados en el asunto. Esta iniciativa, impulsada y coordinada por el colectivo Proyecto Arrayanes, cuenta con el respaldo institucional de los ocho municipios que integran el área norte de la provincia jiennense con mayor influencia de la minería en épocas pasadas: Bailén, Baños de la Encina, Carboneros, La Carolina, Guarromán, Linares, Santa Elena y Vilches.
Algo que se manifestó en la primera reunión de trabajo conjunta celebrada, el pasado mes de julio, en el Centro de Interpretación del Paisaje Minero de la ciudad linarense. La siguiente fase será concretar, para este mes, la celebración de un nuevo encuentro con el que determinar, con mayor profundidad, las próximas líneas de acción. “Desde ese momento se fomentará la participación de distintas asociaciones que tengan interés por colaborar en este proyecto, cuyo principal objetivo es buscar la difusión y la conservación del patrimonio minero. Continuaremos trabajando con la administración para seguir la hoja de ruta definida en las reuniones”, afirmó José Dueñas, presidente del colectivo Proyecto Arrayanes.
La declaración como zona patrimonial requiere de un largo proceso que, al menos, ya cuenta con buena parte del trabajo hecho gracias a la labor de catalogación de los restos mineros realizada por “Proyecto Arrayanes”. “El trabajo de campo ya lo tenemos elaborado, pero habrá que ampliarlo a las necesidades que marque la Junta de Andalucía para continuar con el proyecto, presentar la documentación necesaria y lo que nos vayan requiriendo”, señaló Dueñas. Tal iniciativa está contemplada dentro del marco de las acciones del II Plan Estratégico de la Provincia de Jaén. Su declaración por parte del Gobierno andaluz permitiría reconocer la identidad cultural de los restos mineros que posee el distrito Linares-La Carolina. Además, la consecución de este proyecto supondría la antesala de otras medidas de protección, difusión y promoción de este patrimonio minero a mayor escala, cuyo fin último sería su inclusión como Patrimonio de la Humanidad.
