Si la actividad económica de Jaén fuera un avión se podría decir que tiene dos motores bien definidos. A un lado, el campo, con el aceite de oliva como el principal carburante.
Al otro, el turismo, con grandes joyas patrimoniales y naturales que le ofrecen un magnífico “viento” a favor. Curiosamente, los dos cogen más “revoluciones” en invierno. Cuando hace frío llega el momento de elaborar el zumo de la aceituna y, también, vienen más visitantes en busca de las sierras, el renacimiento y el ocio en los puentes y fines de semana. Y eso que la tendencia marca una mayor desestacionalización, aunque el paraíso interior brilla más cuando hay que recorrerlo con abrigo y bufanda.
El Servicio Andaluz de Empleo, por medio del Observatorio Argos —de la Consejería de Economía— acaba de publicar un informe que repasa la evolución del sector turístico en la provincia. Y sorprende. Cuando baja el paro en octubre, noviembre y diciembre, generalmente, se mira al inicio de la campaña de la aceituna. En cambio, algunos se olvidan del potencial que tienen las empresas turísticas. Según la Consejería, los emprendedores con trabajan con los visitantes que vienen a esta provincia realizaron 9.549 nuevos contratos, que sirvieron para prepararse para la nueva temporada alta. Existen indicadores que invitan al optimismo y a vislumbrar una cierta recuperación. La estadística señala que representa un 26,61% más que los que se hicieron en el mismo periodo del año pasado. De esta manera, el 5,24% de los nuevos puestos de trabajo que se crearon en el cuarto trimestre lo hicieron empresas vinculadas al sector turístico. Quizá suena a poco, pero hay que tener en cuenta que coincide con la contratación de la campaña aceituna, que desbanca cualquier tipo de estadística —hasta las que se hacen en el ámbito nacional—.
No obstante, la estacionalidad que tiene este sector también conlleva a que estos datos tengan un borrón. Los visitantes llegan más en invierno que en verano, por lo que el 97,49% de los contratos tenía carácter temporal. Solo se hicieron 240 indefinidos.
Parados. Hay 4.665 personas que piden trabajo aún, aunque se ha producido un descenso del 2,83%. Por ello, el 4,39% de los demandantes de empleo se encuadra en este sector. Las empresas que se dedican a servir comidas y bebidas son las que dieron empleo a más jiennenses. Concretamente, realizaron 7.551 contratos, de los que solo 184 fueron fijos. Le siguen los establecimientos de alojamiento o, lo que es lo mismo, los hoteles, casas rurales y lugares de acampada, que gestaron 1.530 nuevos contratos. También se registró una interesante subida en los monitores de ocio y de actividad deportivas.
Lo peor es que a las mujeres, al igual que ocurre en el resto de sectores, les cuesta mucho más lograr un puesto de trabajo que a los hombres. De hecho, existen más desempleadas que parados. Por otro lado, las personas que reclaman empleo en este segmento constituyen el 4,70% de todos los demandantes andaluces. Sin embargo, ahora que se prepara la Feria Internacional del Turismo (Fitur), se ve que las empresas de la provincia ven algo más de luz.
