Los tesoros de Jaén aguantan el tirón. No es nada fácil si se tiene en cuenta que los turistas caen en prácticamente todos los destinos y que las provincias de interior lo pasan mucho peor que las costeras porque se les “escapan” visitantes extranjeros. Tampoco es favorable la evolución del consumo.
Los monumentos aguantan en un escenario complicado. El Observatorio Turístico de la Provincia señala que hay un retroceso del 12,56% en términos relativos —en el tercer trimestre—, lo que representa una contracción del 5,51% si se analiza la evolución. Sin embargo, los “faros” que alumbran buena parte de las visitas a la provincia son capaces de resistir en un entorno “tormentoso” y, en ocasiones, hostil a las ganas de emprender de algunos jiennenses. El turismo lo pasa mal, pero se erige como un sector esperanzador con vistas a la recuperación. Cae, pero no está en un abismo. El Centro de Interpretación de la Torre del Vinagre se erige como el espacio más visitado de la provincia que requiere un registro a la hora de pasar. Cuenta con unas 20.000 visitas por trimestre, según el Centro de Estudios Económicos de Andalucía, que toma como referencia el Observatorio Económico de Jaén. El Castillo de Santa Catalina de la capital se muestra como el segundo espacio. Además, registra un incremento exponencial de las visitas. De hecho, en el último trimestre evaluado —el tercero de 2012, que es la referencia para las cifras que aparecen junto a las fotografías— cuenta con un incremento de los turistas que asciende al 31,25%. La Cerrada del Utrero —en el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas— es el tercer espacio más visitado de la provincia. A estos les siguen la Sacra Capilla de El Salvador y el Museo Catedralicio de Baeza.
Resulta singular la evolución de las dos ciudades Patrimonio de la Humanidad. Su devenir turístico va tan de la mano que el aumento o disminución de visitantes en sus monumentos resulta muy similar. El Salvador cae un 6% mientras que el Museo Catedralicio de Baeza lo hace un 7%. Asimismo, la puntuación que otorgan los visitantes a los municipios y, también, a los productores turísticos sigue en aumento. El promedio provincial de valoración del destino se acerca al 8 —sobre 10—. Las mejores puntuaciones se las llevan los paisajes y los parques naturales, los entornos urbanos, la relación entre el precio y el servicio, la información al visitante y el patrimonio cultural.
Los hombres y las mujeres que llegan a Jaén destacan el incremento que experimenta la información turística. Concretamente, crece un 20,91%. La estancia media de los visitantes está en 1,83 días, aunque crece en los parques naturales. Precisamente, son los que muestran una evolución más favorable. Lo peor es que la cuota de Jaén en el mercado andaluz sigue a la baja. Hace falta captar más visitantes extranjeros.
