Fue uno de los mayores expertos que existen sobre este yacimiento, Ángel Concheiro, quien no dudó en manifestar que «Baroña es ahora uno de los yacimientos gallegos mejor protegidos, ya que es poco habitual que un castro tenga un plan especial de protección para regular los usos del suelo y, a mayores, la declaración de BIC, que cuando sea una realidad, este mismo año, supondrá la máxima figura de protección que existe en Galicia».
Cuando el asentamiento castreño se convierta en BIC, lo hará con la categoría de monumento, que es una de las más altas y que lo sitúa al mismo nivel que la torre de Hércules, según explicó el mismo Concheiro, quien apuntó que esto no hace más que confirmar el alto nivel de sus restos arquitectónicos.
La civilización castreña se extendio temporalmente durante casi mil años, alcanzando su máximo esplendor entre los Siglos I a.C y S. I d.C. aunque la influencia romana posterior se encargaría de aplastar todo rastro de esa cultura.
Su extensión territorial no fue tan ámplia como cabria esperar (debido al enorme período de tiempo que abarca) pues se puede hablar exclusivamente de territorio castreño al comprendido entre el norte del rio Duero y el oeste del Macizo Galaico, evidentemente, exiten indicios que nos invitan a creer que se extendieron más allá de esos límites, pero si tenemos en cuenta los escritos de los historiadores romanos los habitantes de las zonas adyacentes ya no tenían un carácter tan marcado y en el que se apreciaran los mismos rasgos que los del noroeste (Estrabón, por ejemplo, habla de los cántabros y astures en su libro "Geografía", y los diferencia de los "pueblos que habitan en el noroeste").
Los primeros arqueólogos postulaban sobre el celtismo de estos pueblos, basándose en los restos de cerámicas encontradas y en la forma de las construcciones y de sus urbes, hoy en día y teniendo en cuenta las últimas excavaciones, no se puede negar la influencia e incluso el origen Celta de muchas de estas tribus o pueblos, pero tampoco se puede negar -mas bien, hay que admitirlo- que tras las invasiones Celtas, las tribus que se asentaron en el noroeste terminaron adaptándose al medio, y con ello dieron origen a una nueva civilización.