Una empresa con responsabilidad social que presta servicios turísticos de calidad para hacer turismo cultural y de naturaleza

domingo, 9 de febrero de 2014

Noticia IDEAL:El vapor de la Baldwin pasa por Linares


Sin Indiana Jones a bordo pero mimada como nunca, la histórica locomotora Baldwin llegaba el jueves a la estación de Linares-Baeza a las nueve y media de la noche para descansar antes de su regreso a Guadix, adonde llegará previsiblemente el viernes por la tarde.

Llega sin prisas, sin indios que la persigan como ocurría en alguna de las películas que protagonizó esta mítica locomotora a vapor durante la década de los sesenta y setenta, la Baldwin, la locomotora 140-2054 Guadix, la niña mimada de las vías desde hace varios días. A cargo de ella se encuentra un equipo de dos personas de mantenimiento pertenecientes a la Fundación de Ferrocarriles de España, encargados de engrasar la histórica locomotora cada cuarenta kilómetros.

Su viaje de regreso a Guadix es tedioso pues, junto a las paradas técnicas de obligado cumplimiento para el mantenimiento de la locomotora, la velocidad máxima del tren remolcador es de cincuenta kilómetros y, eso sí, siempre adaptada a las necesidades de la circulación en cada momento, según explicaba anoche el maquinista.

Esta locomotora fabricada por la Sociedad Española de Construcciones Babcock Wilcox en Bilbao allá por 1928 es una de las últimas locomotoras que aún funciona con carbón como combustible en España. Tras prestar servicio real en Guadix y comarca, perteneciendo en su día a Ferrocarriles Andaluces con matrícula 4106, hasta 1956, la Baldwin quedará en la memoria de cualquier cinéfilo adicto al 'spaghetti western' que se rodaban en el oriente andaluz, o incluso a las aventuras de Indiana Jones y el Doctor Zhivago.

El interés que despierta esta locomotora, conocida como 'La Guadix', es patente desde hace días en diversos foros de aficionados al ferrocarril de Andalucía Oriental que, desde hace varias semanas, esperan el regreso a casa de esta vieja bestia negra y roja. Así, y a pesar de las horas de retraso y el mal tiempo, decenas de curiosos esperaban su llegada a la estación de Linares-Baeza en la tarde de ayer, en donde se la vio aparecer por última vez en julio de 2001 tras su viaje a Lérida para su restauración.

Después de la celebración del centenario de la vía ferroviaria Almería-Guadix-Linares, en 1995, el Museo Ferroviario se la cedió a Guadix, pero su completo estado de abandono hacía necesaria una restauración en casi su totalidad y, para ello, se llevó por carretera a Lérida.

Tras la restauración y su regreso a Guadix por sus propios medios, quedó depositada en un hangar situado en el antiguo depósito de tracción de vapor de la estación, donde volvió a sufrir serios desperfectos, sobre todo en el sistema de freno. En los últimos tiempos ha estado cedida a otros municipios, el último Portbou, en los que se ha utilizado como soporte turístico y en hasta que finalmente volverá a Guadix tras salir este martes desde el Museo de Las Delicias en Madrid y trasnochar en Alcázar de San Juan y Linares-Baeza.